Cabra disfrutó en la jornada del pasado 4 de septiembre de uno de sus días más señalados en el calendario, al vivir desde bien temprano con el repicar de las campanas, el anuncio de la Bajá de la imagen de María Santísima de la Sierra desde su santuario a la ciudad de la que es patrona y alcaldesa perpetua. Una jornada que se abrió la noche anterior en el parque Alcántara Romero, en donde el jefe del Servicio de Cirujía y ex director del hospital Infanta Margarita, José Plata Rosales, dejó una honda huella con su pregón en la devoción y fervor que siente por la divina serrana, acercando a los egabrenses a una milenaria devoción de la que ahora se cumple el 1.300 aniversario de la ocultación de la imagen y el 775 aniversario de su hallazgo en una cueva de la sierra de Cabra.

Y es que "el 4 a las 4", siempre marca un antes y un después entre los fieles y devotos, siendo varios los miles de personas que la acompañaron por un camino arreglado un año más para la ocasión, entre riscos y jaras, sobre los hombros de sus costaleros.

Un gentío que no impidió que se fueran cumpliendo los horarios marcados y que facilitó el caminar de los costaleros que en sus andas de plata portaron a la imagen serrana, que centraba la atención en lugares emblemáticos para los fieles como La Viñuela, el Peñón de la Beata, Los Colchones o la Casilla de la Salve, donde una vez más fue portada a hombros de las mujeres mientras se le cantaba la Salve popular por Antonio Roldán y unas coplas por los hermanos Egea.

Luego tras parar en la Casilla de Góngora, entró a las 19;30 horas a la barriada que lleva su nombre donde tras ser de nuevo ataviada y celebrarse una eucaristía en la iglesia de San Francisco y San Rodrigo, entrando la imagen entre fuegos artificiales en el centro del casco urbano por los arcos de la antigua calle Baena a las 22.30 horas.

Allí el alcalde, Fernando Priego, le impuso la vara de mando que la acredita como alcaldesa perpetua, siendo recibida por el clero, la corporación municipal, autoridades, hermandades, gremios y vecindario, junto a la banda de música de Cabra, caballistas y 65 carrozas decoradas con flores de papel, como se vienen haciendo desde hace décadas, para celebrar por todo lo alto la llegada a la ciudad de la imagen sagrada que regresará a su santuario en octubre.

Uno de los momentos más intensos de las Fiestas de Septiembre en su honor, cuya programación contó con un presupuesto que se vio incrementado en un 9,15 % respecto al del pasado año, al contar para ello con un total de 70.270 euros, de los que 66.545 euros fueron para actividades y 3.725 euros para los premios de distintos concursos.

El programa de fiestas, como explicó la delegada del área, María José Villatoro, contempló un centenar de actividades para el que se contó con la colaboración de distintas asociaciones y entidades y entre las que destacaba un año más el 14ºrecital poético-musical que bajo el título ¿Qué sería de este paisaje si no estuvieras tú? se ofreció en el Patio del Castillo. Las fiestas finalizaron el 8 de septiembre con una colección de fuegos artificiales tras la solemne procesión de la Virgen de la Sierra, acompañada por centenares de fieles. A su paso por el Centro Filarmónico Egabrense se le cantaron sus coplas y la plegaria Amorosa madre y la Salve popular en la Plaza de España, que en esta ocasión en una versión flamenca a cargo de Carmen Cuenca Alcántara.