El Ayuntamiento de Cabra aprobó unánimemente en sesión plenaria la suscripción de un convenio con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir por el que se compromete al mantenimiento y a la conservación de las actuaciones de uso recreativo que serán ejecutadas por la CHG en el tramo alto del río Cabra, a través del proyecto de restauración ambiental e integración urbana y paisajística.

Un trámite que, como explicó el alcalde, Fernando Priego, es uno de los últimos pasos a dar para el comienzo de estas obras a lo largo del próximo año y que con una inversión de algo más de 4 millones de euros, actuará sobre una longitud de 4.500 metros con la finalidad de recuperar el espacio fluvial necesario para evitar que este enclave se degrade aún más como consecuencia de la presión de las zonas aledañas, con abundantes vertidos e intensamente urbanizadas, industrializadas, cultivadas e intervenidas por el hombre.

De igual forma, con el voto de todos los grupos salió adelante una moción del grupo popular solicitando a la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA) que con carácter de urgencia se actúe en las 250 viviendas de protección oficial pertenecientes a las urbanizaciones Pedro Garfias, Poeta Tomás Luque y Nuestra Señora de la Paz, para solucionar sus problemas de mantenimiento y la elaboración de un plan anual de inversión, para que sus vecinos puedan vivir en ellas en condiciones dignas y seguras.

Una cuestión que contó con el apoyo del grupo socialista, si bien su portavoz, Jesús Rodríguez, recordó que el AVRA sí ha venido actuando en esas viviendas.

El alcalde, Fernando Priego, por su parte, expresó que considera la inversión anunciada por AVRA para solucionar los problemas de la urbanización Pedro Garfias como claramente insuficientes, pues subrayó que los problemas denunciados hace unos días por sus propios vecinos, no se limitan a los malos olores producidos por la rotura de tuberías en los sótanos de los bloques de los inmuebles.

EXPROPIACIÓN DE UNA NAVE

Por último, entre otros asuntos y con carácter de urgencia, volvió a la corporación municipal el asunto de la expropiación de la denominada «nave de Galisteo» para dar cuenta que el proceso de expropiación del inmueble ubicado en la avenida de Andalucía y que permitirá dar viabilidad a la ejecución de una nueva vía, la denominada A-10.

Así el alcalde, Fernando Priego, informó que si bien en dicho expediente no se habían cometido irregularidades, sí hubo un defecto de forma debido a la presencia de un miembro del equipo de gobierno municipal, el delegado municipal de Obras e Infraestructuras, Juan Ramón Pérez, en la Comisión Provincial de Valoraciones que fijó el justiprecio de la expropiación, como fue señalado por el PSOE en un anterior Pleno del Ayuntamiento.

En este sentido, se añadía que en ningún momento se le informó al Consistorio que éste no podía estar en la misma y que correspondía a un técnico bien municipal o bien contratado por el Ayuntamiento, recordando que este asunto se encuentra en vía judicial al haber mostrado la propiedad su desacuerdo al igual con el justiprecio fijado por la mencionada comisión.