A ellos no les hace falta acreditación, tienen su entrada y cinco horas de autobús que a la vuelta se convertirán en diez. No les importó darse un madrugón para visitar un campo tan poco atractivo como Santo Domingo, pese a los antecedentes, que no eran nada halagüeños. Mucho mérito para esos seguidores que no se conformaron con verlo por la televisión y que estuvieron a punto de ser portada de periódico, pero esa foto, con Fidel, Florin, De Tomás y Cisma celebrando un gol con su hinchada eufórica, con la boca abierta, gritando, se quedó finalmente en la parte baja de una página impar y ni siquiera ilustra un artículo positivo.

Pasó al olvido la foto, como pasará al olvido esta temporada si no se consigue el ascenso, aunque quizá no, porque en la mente de todos perdurará la extraordinaria delantera que había y la escasez en la defensa.

La foto quedó relegada, pero el debate no, pese a que ya resulta estéril, una vez cerrado el mercado invernal de fichajes.

-- Otra vez igual. Los tres goles han sido fallos claros de la defensa. La misma historia.

-- ¿Tan mal han estado?

-- Puf, fatal.

Es una conversación entre dos seguidores blanquiverdes y no les pongo nombre porque pueden ser cualquiera; es fácil que tú, aficionado, hayas tenido esa misma charla con algún amigo, ayer, hace una semana, hace dos semanas... Se ve tan claro que hasta en la propia plantilla lo reconocen. "Quizás los goles vinieron por despistes nuestros", observaba Pedro Ríos, que luego intentó justificar los errores. "En un campo así, con un equipo tan guerrero y de mucha pelea, es normal que haya despistes".

Falcón empleó otro sustantivo y fabricó un titular que podría haber sido el de la crónica. "Regalos por los dos lados". Pero el cancerbero no trató de excusarse. "Tenemos que disminuir o no conceder tanto esos goles, ya que nos cuestan puntos". Su sensación tras el partido podría ser similar a la de todos esos hinchas blanquiverdes: "Rara".

Ya es algo habitual, fallos atrás y goles encajados en el tramo final de los partidos. Hasta no hace mucho, también eran habituales fotografías como las de la página 39 en la portada, pero desde hace casi un mes han desaparecido.

Dicen que la sensación es rara, supongo que por usar un adjetivo que suavice la realidad.