El orden defensivo de este Espanyol nace desde su portería, donde el cada vez más maduro Casilla aporta la tranquilidad necesaria, dominando su área y zona de influencia. Parten los pericos del concepto de la intensidad, la presión tras pérdida y el repliegue formando bloque, como premisas para dar solidez a sus resultados y sacar partido a la rentabilidad y eficacia de sus goles a favor.

El trabajo y compromiso de todo el grupo es muy importante, empezando por su jugador más importante, Sergio, quien inicia la presión, a la que siguen Stuani/Caicedo y hacen fuerte sus hombres de banda, Lucas, Montañés, Salva Sevilla, más los laterales Javi López, Fuentes, Arbilla. No solo manejan el concepto presión y recuperación sino que resulta fundamental la posición y anclaje de sus mediocentros para buscar y encontrar el repliegue necesario una vez que se sienten rebasados en su primera línea.