Decía en tono jocoso un antiguo entrenador cuando trabajaba en el Córdoba que, si él supiera de fútbol, hubiera echado todas las semanas una quiniela para que le tocaran siempre los 15 y retirarse, precisamente, del fútbol. Y si él, que se ha ganado y se gana la vida bastante bien en esto comentaba eso, dónde quedamos los demás. Así, nos hemos pasado todo el verano diciendo que, al menos, el Córdoba mantenía la estructura defensiva de la temporada pasada, tanto por nombres como por esquema y entrenador, y que los problemas de este equipo llegaban, en el inicio de temporada, por la falta de delanteros. En el debut en El Arcángel, el Córdoba anotó tres goles y encajó otros tres, por lo que ahora tocará explicarlo. Si se puede.

El conjunto blanquiverde pareció salir a verlas venir, sabedor de todo el mar de fondo que le había afectado durante el verano. En cualquier caso, Sandoval tenía un once aparente y, sobre todo, un banquillo inicialmente válido, con hombres como Bambock, Piovaccari, Luis Muñoz o Quim Araújo, entre otros. La iniciativa fue del Numancia, aunque sin nada destacable en juego. De hecho, los acercamientos al área rival en el primer cuarto de hora fueron blanquiverdes, con una internada de Fernández que finalizó con un disparo muy desviado de Javi Lara, un remate de Alfaro, situado en fuera de juego y solo ante Juan Carlos, que detuvo el portero rojillo, y otra aparición en el área de Jovanovic, que no encontró compañero. Sin embargo, las ocasiones más claras fueron para los visitantes, lo que obligó a Stefanovic a sendas apariciones salvadoras, aunque con el pie dio un mitin durante todo el encuentro. La primera, con una parada tras un cabezazo de Guillermo, y la segunda, en un contragolpe tras saque de esquina local -ojo con eso- llevado por Yeboah y disparo final de Guillermo, ante el que el portero serbio se lució. Obviamente, el partido discurrió por los cauces de un choque típico de inicio de temporada o, lo que es lo mismo, de final de pretemporada. Pero la falta de ritmo, el pase horizontal de forma insistente y un punto de aburrimiento terminó de golpe con el cabezazo de Sasa Jovanovic a pase de Alfaro en el minuto 36. El Córdoba no se conformaba con la igualada y sabía que la mejor manera de dar carpetazo al último mes y medio era con un triunfo que obligara a mirar con un punto mayor de optimismo no sólo el futuro a largo plazo sino, incluso, al final del mercado veraniego de fichajes.

La recta final del primer acto anduvo movida: alguna entrada a destiempo de los rojillos, un balón largo a Guillermo ante el que salió Stefanovic -aunque el delantero numantino estaba en fuera de juego- y algún rifirrafe de Valentín y Aythami -cómo no- con algún adversario en el centro del campo. La cosa no fue a mayores y Díaz de Mera mandó a todos a los vestuarios y en El Arcángel se vivía esa sensación de que igual todo no estaba tan mal. O sí lo estaba, pero que los demás tampoco están para tirar cohetes.

El Numancia despejó las dudas tras el regreso de las duchas, en las que se quedó el Córdoba con excepción del gol de Javi Lara de un precioso zapatazo. Pero fue un espejismo. A Sandoval se le cayó el trío por delante de los centrales, lo que provocó una grieta en el entramado defensivo, sobre todo por la izquierda, en donde Yeboah hizo lo que le dio la gana o, más bien, mientras quiso su entrenador.

Además de ese gol del montoreño, en el primer cuarto de hora del segundo acto El Arcángel sufrió tres goles del rival: uno, a balón parado tras el saque de esquina que cabeceó Carlos Gutiérrez. Otro, en jugada individual de Yeboah con un trallazo lanzado con rabia y un tercero de Alain, a placer, tras servicio de Diamanka. Ganó Sandoval y su equipo con la entrada de Jaime Romero por Alfaro y, sobre todo, con el cambio de Piovaccari por Valentín. Apareció de nuevo el Córdoba de la última fase de la temporada pasada. El del empuje, el del corazón, el de la casta, para cambiar las pequeñas voces de ánimo en la grada en un hervidero de gritos para intentar llevar en volandas al equipo. El italiano hizo daño entre los centrales rojillos. Jaime Romero generó dudas, tanto entre líneas como en la banda. El Córdoba merodeaba a Juan Carlos, si no con ocasiones clarísimas, sí al menos con llegadas que generaban preocupación en la escuadra soriana. Entró también Quim Araújo por Javi Lara y en los últimos 10 minutos -salvo por un un contragolpe numantino- se vio a un Córdoba volcado buscando la igualada, al menos, para mantener la ilusión.

A tres del final, una nueva subida de Fernández -de los mejores de los suyos- finalizó con un cabezazo de Aythami, inapelable, que restablecía el equilibrio en el marcador, un resultado que no puede catalogarse de injusto y que, además, ayuda a que no se vea todo negro. Este Córdoba no se merecía la derrota. Ni por lo visto sobre el terreno de juego ni por lo ocurrido durante el verano. Un verano que ha afectado bastante y que se notó sobre el terreno de juego de El Arcángel. El punto físico está lejos del ideal, incluso para ser la primera jornada liguera. Los tres -más bien cuatro, contando a Alfaro- que había por delante de los centrales deben cambiar y mucho y a ello ha de contribuir el club con la aquiescencia de LaLiga.

Pero mientras todo se encaja (físico, sistema, posibles nuevos jugadores...), el margen de mejora es evidente, tanto para el equipo como para el club. El objetivo está un punto más cerca.

Ficha técnica:

Córdoba 3 - Stefanovic, 5, Fernández, 6, Álex Quintanilla, 5, Aythami, 6, Jesús Valentín, 5, Javi Galán, 5, Álex Vallejo, 5, Álvaro Aguado, 6, Alfaro, 5, Javi Lara, 5, Sasa Jovanovic, 6.

Numancia 3 - Juan Carlos, 5, Markel, 5, Carlos Gutiérrez, 6, Pichu Atienza, 5, Marc Mateu, 5, Escassi, 5, Diamanka, 5, Fran Villalba, 6, Yeboah, 7, Guillermo, 6, Alain, 6.

Técnico: José Ramón Sandoval. Cambios: Jaime Romero por Alfaro (min. 63), Piovaccari por Valentín (min. 68) y Quim Araújo por Javi Lara (min. 81).

Goles:

1-0 (m. 36) Jovanovic, a pase de Alfaro.

1-1 (m. 50) Carlos Gutiérrez, tras cabecear un saque de esquina botado por Alain.

2-1 (m. 57) Javi Lara, de fuerte disparo desde la frontal tras dejada de Javi Galán.

2-2 (m. 59) Yeboah, tras jugada individual.

2-3 (m. 61) Alain, al empujar a la red un pase de Diamanka.

3-3 (m. 87) Aythami, al cabecear un centro de Fernández

Árbitro: Díaz de Mera (castellano-manchego), amarillas a Vallejo, Markel y Mateu.

Espectadores: 11.685 espectadores.