La toma de decisiones en la gestión deportiva es crucial en el mes de enero. La liga BBVA ha cerrado el mercado con unos 45 millones de euros de gastos y 34,3 millones por ventas. El Córdoba con cinco incorporaciones y seis salidas ha sido uno de los clubs más activos en este mercado. Posiblemente, el éxito económico de un club radique en la gestión de reclutamiento de jugadores y en saber su justa valoración dentro de los parámetros que se manejan en el mercado. Por eso, el buen gestor profesional no debe gastar el primer día todo lo que tiene, hay que ser pacientes (no lentos) para elegir las mejores opciones. El gestor profesional no debe creer todo lo que le dicen (información exterior llena de intereses), debe seleccionar y elegir la mejor opción que demanda el equipo para sobrevivir (los pobres no tienen licencia para equivocarse), y no debe decir todo lo que sabe (cualquier información que sale al exterior puede encarecer el producto). La gestión de los profesionales en el fútbol es como la vida misma, donde todos pasamos por un cásting muy riguroso, pero a medida que pasa el tiempo todos pasamos y nadie se queda. Cuando haces una buena gestión con el tiempo casi nadie lo recuerda; cuando te equivocas, nadie lo olvida. Frente al Celta, el Córdoba tuvo un doble castigo: el primero el claro penalti no pitado a su favor; el segundo, que tuvo miedo de ganar. Un equipo campeón tiene miedo de perder. Los demás tienen miedo de ganar. Ante las derrotas jamás se deben poner excusas, solo deben servir para rectificar y mejorar, y el Córdoba solo supo dar buena lectura al partido en el último tramo, el resto, cedió el campo y el balón al rival, defendió muy cerca de su área y sufrió mucho con movimientos diagonales desde los costados con los que le combatió el rival. En fútbol los errores tienen tres partes: aceptarlos, superarlos y no volver a cometerlos.