Vivió una época muy diferente a la actual en blanco y verde. Rafael Campanero y Javier Zubillaga le convencieron, al alimón, para que recalara en el mercado invernal de fichajes de la temporada 2008/09, justo cuando unas semanas antes Emilio Vega, actual director deportivo del Córdoba, presentó su dimisión. Zubillaga se hizo cargo tras intentar --sin éxito-- el presidente de honor que Pedro Campos asumiera el control deportivo del club. Junto a él llegaron Gustavo Oberman y Javi Casas, lateral del Athlétic de Bilbao. Pero el rumbo apenas se enderezó. Eso sí, lo justo como para lograr salvar la categoría. Tras su estancia de cinco años en Soria y su buen rendimiento este año en Palamós, el de Canals ha vuelto cerca de casa, en concreto al UCAM Murcia, club «en el que se están haciendo las cosas muy bien», asegura.

-Tras años de estabilidad en Soria, le tocó de nuevo viajar.

-En Soria se buscó una salida de última hora porque el Llagostera insistió mucho en que fuera allí para ayudarles a salvar el equipo junto a otros compañeros. La salida de Soria sí que me costó porque eran muchos años allí teniendo una estabilidad. En el tema personal me fue bien (siete goles),pero lo importante era el colectivo, que era salvar la categoría, y nos quedamos a cuatro puntos de lograrlo, después de haber hecho una primera vuelta de 15 o 16 puntos y una segunda vuelta, cuando llegamos, de treinta y pico puntos. Fue una lástima, pero el descenso nos condena a todos a buscarnos la vida. Y ahora he venido al UCAM Murcia, un club que acaba de subir, que ha sido campeón de Segunda B y que tiene una buena base con la gente nueva que ha llegado. Vamos a intentar salvar al equipo, que es la premisa, y luego veremos qué pasa. Pero el primer objetivo es salvar la categoría. Es un club predispuesto a todo, a crecer, lo está haciendo todo muy bien. En el campo han puesto césped nuevo, han remodelado y han hecho un lavado de cara con presupuesto del mismo club, sin ninguna ayuda del Ayuntamiento. Es un club muy humilde pero con el trato al futbolista muy alto.

-Como en Llagostera, a sufrir, porque el inicio el Zaragoza no fue muy bueno.

-El parecido es que son novatos en la categoría. Fuimos a un campo muy difícil ante un equipo que se ha reforzado muy bien. No supimos ponernos a la altura de ellos en el tema de competir. Tuvimos muchos errores colectivos. En el minuto 8 ya te meten un gol, dudoso, en fuera de juego, y eso ya a ellos les da alas. Jugar con un marcador adverso en un campo así cuesta más, pero todos los equipos de Segunda, si quieren lograr sus objetivos, deben ser fuertes en casa, tienen que ganar sus partidos. Nuestro campo es como cualquiera. Es grande, no tiene ninguna particularidad, porque La Condomina ha albergado partidos de Primera. Tiene medidas grandes, el césped lo han puesto nuevo, todo el graderío está pintado, asientos nuevos, vestuarios nuevos, así que es un estadio muy bueno, quedará muy bonito. No hay que excursarse en que pueda ser un campo pequeño, porque no es así, pero debemos ser fuertes en casa, ser ambiciosos, que los que nos ganen en casa tengan que sudar sangre. Hemos empezado a entrenar hoy, hemos visto vídeos, estamos corrigiendo errores y el tema de correr, competir, eso no es negociable.

-Sudar sangre, empezando por el Córdoba, ¿no?

-Así es. Será un partido difícil, como todos en la categoría, ante un rival muy bueno, como demostró el año pasado, que se quedó a las puertas de subir. Tiene un entrenador con las ideas claras, un muy buen equipo, buena base, con futbolistas que ha fichado que son buenos, pero en Segunda todos los equipos pueden ganar a cualquier otro equipo, sobre todo en casa. Ya lo demostró el año pasado el Llagostera, que le ganó al Alcorcón, al Oviedo y al Córdoba, precisamente. Cualquier equipo que peleaba arriba por algo, iba allí y caía. Nosotros tenemos que mirarnos en eso, en que podemos ganarle a cualquiera, competir y hacer las cosas bien. Y sacar resultados positivos.

-Coincidió en Palamós con Samu de los Reyes.

-Así es. Tan buen futbolista como persona. Es un tío estupendo. Me alegro mucho de que haya vuelto allí, a su casa. Es un jugador muy bueno, tiene unas aptitudes tremendas, tiene muchos años de fútbol porque es muy joven y le auguro todo lo mejor.

-¿Qué recuerdos tiene de su paso por aquí?

-Recuerdo llegar allí como el año pasado con el Llagostera. Era un equipo que estábamos a seis puntos de la salvación. Es verdad que tuve otras opciones, pero por insistencia del director deportivo y del club decidí irme para allá, vivir esa experiencia. Conseguimos la salvación a falta de dos jornadas. Empecé jugando arriba, luego en banda, no estuve acertado de cara al gol como me hubiera gustado, pero sí recuerdo esa etapa bien porque salvamos la categoría. La afición allí, cuando estuve, me trató muy bien, también los compañeros y el club. Del Córdoba siempre guardo buenos recuerdos.

-¿Dónde se siente mejor en el campo?

-Mejor arriba, tanto delantero como de segundo delantero, porque no soy específico de banda. Donde más he rendido y más se me ha visto es arriba. Tanto de delantero centro, como en la mediapunta, con un delantero grande de referencia. Ahí es donde mejor he rendido.

-¿El Córdoba se encontrará el domingo el UCAM de La Romareda o el que quiere Salmerón?

-Creo que este domingo hemos hecho borrón del partido del lunes. (El Córdoba) se va a encontrar un equipo más rocoso, un equipo que quiere el balón, que quiere pelear, que tiene mucha velocidad. Ya sabemos dónde estamos. Varios futbolistas no habían jugado en Segunda y ya saben lo que es. Los que habíamos jugado ya avisamos de que esto podía pasar. Y a partir de ahí creo que vamos a crecer y qué mejor ocasión que ante un equipo tan grande como el Córdoba, que debería estar en Primera, pero es que es muy difícil subir.