Florin Andone es el protagonista hoy por hoy en el Córdoba. El reconocimiento de la afición, sus goles, sus polémicas declaraciones tras el esperpento de Granada y un futuro en el que el club está intentando hacer caja con él hizo que la rueda de prensa de ayer tuviera más profundidad de lo normal. Empezó el delantero cordobesista hablando de los incidentes ocurridos el pasado lunes y de la afición. Para empezar, comentó la decisión de abrir las puertas de la sesión tras llevar el equipo mucho tiempo descendido: "Tenemos que respetar las órdenes que vienen de arriba; en cuanto a los aficionados, mientras haya respeto de su parte, están en su derecho a hacer y a manifestar lo que crean conveniente. El enfado que tenía tras el último encuentro tuvo su consecuencia en unas declaraciones que dieron la vuelta en todos los medios nacionales. Florin comentaba que "lo que dije lo dije fue hace unos días y ahora estamos a martes. Es verdad lo que dije y es que estaba muy caliente", reconoció el rumano, que también explicó que "nosotros hablamos muchas cosas en el vestuario y son cosas que se quedan dentro de la confianza de los compañeros. Hemos tratado todos los temas y todos los problemas. Intentamos hacerlo lo mejor posible y este tipo de temas son cosas que se quedan ahí". Evidentemente, el discurso dejaba entrever que sus manifestaciones no habían sido aceptadas por todos sus compañeros por igual. A pesar de ello, Florin intentó explicarlas, aduciendo que "en ese momento yo tuve la sensación de haber hecho un mal partido y de no haberme encontrado bien y quizás mi frustración personal la manifesté mal, a pesar de ello está todo aclarado en el vestuario y no ha habido problema".
Tampoco dejó de ser llamativa la respuesta del goleador cordobesista sobre los argumentos mentales esgrimidos por su actual técnico desde la llegada de Romero al vestuario. De hecho, le costó incluso articular la idea para poder expresarla. "No sé explicar muy bien el tema porque no entiendo lo que quiere decir con el tema de la gestión mental", aseveró, "lo que sí creo es que nos han faltado cosas durante el año y ha ido mal por esto. Cuando Romero llegó, nos tomamos la situación con máxima ilusión queriendo aprender de él", remató para intentar salir del paso.
Finalmente, también habló de su futuro, en el que si los movimientos del club fructifican, será lejos de El Arcángel. "El tema de un posible traspaso no lo llevo yo, esto es cosa de mi representante y, además, en este momento no me interesa nada. Lo único que tengo en mente es que soy jugador del Córdoba por dos años y estoy tranquilo. Si tiene que venir algo se hablarán las cosas y ya está". Tras ser insistido en que el Córdoba estaría en Segunda, Florin comentó que "hay que valorar las opciones que haya, pero como he dicho soy jugador de este club por dos años y al final nos reuniremos el presidente, Pedro Cordero, mi agente y yo para tomar una decisión".
Para rematar su comparecencia, Florin argumentó que ante el Rayo "vamos a salir intentando hacer un buen partido, por lo menos darle una pequeña alegría a la afición antes de descender a Segunda. La afición está en su derecho de decir lo que quiera y hay que saber que será un rival complicado porque es muy difícil ganar".
