Tres de los cuatro máximos responsables del Córdoba comparecieron ayer -faltaba el recién nombrado director general, Alfredo García Amado- para, oficialmente, presentar a José Ramón Sandoval. Sin embargo, las palabras del triunvirato blanquiverde fueron encaminadas a transmitir la dura realidad del club, bloqueado en el mercado veraniego de fichajes por LaLiga y dibujar el panorama que parece más factible de aquí al 31 de agosto: el Córdoba no podrá fichar y, como mucho, LaLiga le permitirá tres o cuatro incorporaciones por el mínimo interprofesional.

Es decir, jugadores probablemente sub 23 con una ficha en torno a los 80.000 euros cada una. Si luego se encuentra un escenario mejor, el director deportivo, Rafa Berges, reconoció que se contempla también, pero el presidente, Jesús León, dejó claro que para que el traspaso de Guardiola se realice ha de vender antes el Getafe al menos a dos de los jugadores que tiene en el mercado: Djené, Shibasaki y Ángel. En caso de que los azulones no ingresen lo que pretenden, el Córdoba no podrá ejecutar el traspaso y, con ello, el límite se quedará como está, en «dos o tres millones de déficit», como reconoció ayer el propio León. LaLiga, posiblemente, permitirá inscribir a los jugadores con contrato que aún no lo están, Kieszek, Edu Ramos y Zelu -no Bambock, como informó por error este periódico- y, además, podría permitir, como hizo en el pasado con algún otro club, la incorporación de tres o cuatro fichajes con ese mínimo de ficha. Será un reto más el poder competir desde agosto con un plantel justo hasta enero. En esos cuatro meses deberá trabajar intensamente el club para mejorar muchas cosas de cara a LaLiga y para ello ha llegado Alfredo García Amado, inserto en un organigrama sobre el que León aseguró que se publicaría en los próximos días.

Quien no se arredra, sino todo lo contrario, es José Ramón Sandoval. El de Humanes, como en febrero, volvió a convocar al cordobesismo para afrontar un reto menos difícil, para él, que el que tenía el equipo en la pasada temporada: «Ahora hay más tiempo», argumentó, lanzando un mensaje, desde la realidad («50 puntos»), de unidad.