Carrión, Samu Sáiz y Luso Delgado

Ya no le salvan ni las buenas intenciones; demasiados errores

Demasiados problemas tiene este Córdoba como para que tenga que ser Luis Miguel Carrión el que los solucione. Y, desde luego, esos contratiempos y falta de calidad y compensación de la plantilla no se solucionan echándole piropos como se le echaron desde arriba nada más llegar. Porque hay inconvenientes que ni un técnico «que triunfará en un Primera» ni tan siquiera un mago. Eso sí, en otro bandazo, el catalán se equivocó y le faltó agilidad. Sin mediocentro defensivo, con un fichaje de enero en la grada y con la entrada de Vadillo. Demasiados errores.

SAMU SÁIZ / BUEN PARTIDO

Si llega a tener acierto cara a gol hubiera cerrado el encuentro

El madrileño fue un incordio para el Córdoba desde el primer minuto, favorecido -todo hay que decirlo- por la ausencia de intensidad en la medular blanquiverde. La velocidad del mediapunta azulgrana no hubo forma de pararla en todo el encuentro. Dispuso de hasta cuatro ocasiones -dos de ellas clarísimas- y sólo su falta de acierto en los últimos metros pospuso el drama cordobesista. La entrada de Vadillo terminó por romper al Córdoba: primero, con una expulsión; luego, con dos goles en los que ambos fueron protagonistas. Decisivo en el triunfo azulgrana.

LUSO DELGADO / BOTÓN DE MUESTRA

Otra ausencia significativa para las próximas jornadas

La expulsión de Luso Delgado, en el banquillo, es un botón de muestra del estado de tensión que vive el equipo ante las expectativas generadas por el club desde el pasado verano, con las correspondientes exigencias por parte de los abonados. Su roja directa supone que el maño estará probablemente dos encuentros fuera de los planes de Carrión, lo que se une a la ausencia de Aguza -también expulsado-, Deivid -lesión- y Jonathan Bijimine, éste, tras el episodio extradeportivo vivido la pasada semana. Si cae uno más esta semana, Carrión tendrá a los 18 justos para Valencia.