Fue muy sonada, en una de sus primeras comparecencias como entrenador del primer equipo del Córdoba CF, aquello que sostuvo Luis Miguel Carrión de que prefería una victoria abultada, aunque su equipo también encajase muchos goles, a un triunfo por la mínima. Entonces el técnico, que acababa de salir del filial un par de meses después de haber logrado un ascenso ‘fácil’ a Segunda B, donde ya la situación se complicó algo más, iba ganando partidos, insufló una ilusión renovada con el pase de Copa del Rey ante todo un Primera y aún mantenía esa «valentía» de la que siempre ha hecho gala.

Ahora, el descenso aprieta. Está a solo un punto y ve cómo se alejan los que están por encima. Por eso, como los propios jugadores han reconocido, todos los partidos que quedan son una auténtica final en clave cordobesista.

Así, Carrión ofreció ayer en la sala de prensa de El Arcángel, donde analizó los pormenores del encuentro de mañana ante el Elche, su lado más práctico. «Quiero un equipo que no conceda mucho al rival y, si necesitamos muchas para meter un gol, pues que sea ese gol el que nos dé la victoria», sostuvo el técnico.

Y, para ello, es básico que el equipo crezca desde atrás, sin encajar. «Que no tengamos que ir a contracorriente, generando, pero dejando espacios atrás. Lo ideal sería defender bien y seguir generando ocasiones. No podemos ser un equipo plano, como fuimos el día del Numancia. En Sevilla llegamos. Eso es lo que quiero», claro que con diferente resultado.

CAMBIO DE SISTEMA

El técnico no quiso desvelar si cambiaría de sistema ante la ausencia de Domingo Cisma, que no se podrá volver a vestir de corto hasta el 2018. Deivid será su relevo natural, toda vez que ha Bijimine todavía no le ha llegado el indulto, pese a que la semana pasada debutó con su selección. «Lo que me gusta de un equipo es que tenga varias posibilidades, que las conozca todas y que no sea jugar por jugar. En cada partido, unas características diferentes. Estamos preparados para jugar con cualquier sistema. Es cierto que el sistema que hemos utilizado nos ha dado victorias».

Y es que Deivid vuelve para aportar cosas distintas, ya no solo a la defensa, también a todo el equipo. «Entiende muy bien el juego. Tiene buena salida de balón. Es normal que ahora no está al 100%. Tendrá que coger minutos. Tiene mucha comunicación en el campo y es un chico que viene con muchas ganas. Es la primera lesión que ha tenido en su vida. Al equipo le va a venir bien».

Precisamente, la salida de balón ha sido uno de los principales calvarios del equipo esta temporada. En cualquier caso, el central canario está para jugar y, de hecho, no ha participado ante «por un tema de papeles».

Entre el resto de lesionados, el técnico confía en que hoy Luso entrene con normalidad, mientras que Caballero y Juli están descartados.

Enfrente estará un Elche irregular («versiones buenas y otras no tanto») y lejos de los puestos de promoción. El técnico alabó al conjunto franjiverde. «Intenta tener el balón todo lo que puede», «tiene gente arriba muy dinámica», «las bandas son muy rápidas». Ahora bien, «se le puede hacer daño, como a cualquiera de la categoría».