Tras la cierta carga físicadel lunes y el trabajo de ayer por la mañana, ya se veían algunas caras de cansancio al finalizar la sesión matutina en algunos de los componentes del conjunto blanquiverde. Seis días de esfuerzo, tres de ellos con doble sesión y con un partido amistoso contra el Almería que tuvo poco de amistoso, era lógico que el esfuerzo se hiciera notar en los jugadores de Luis Miguel Carrión. Quizá por eso se hizo aconsejable que Josema trabajara aparte y también puede que por el mismo motivo Josema entrenara aparte, con Javier Poveda, el saliente Quiles y los lesionados Jaime Romero y Álex Vallejo. Por lo tanto, a la sesión matutina, con su punto de exigencia física también, le siguió una por la tarde en la que tuvo protagonismo los juegos con balón, siempre con la mano, y un partidillo a mitad de campo en el que, al contrario del resto de sesiones, no tuvo esa obligación de presión constante para robar el esférico. A fin de cuentas, el trabajo está hecho. Sólo les resta a Carrión y a su equipo la sesión matutina de hoy y pasado mañana, viernes, y el encuentro amistoso contra el Sanluqueño de mañana jueves.

Por lo tanto, lo más llamativo de la jornada de ayer fue la presencia del máximo accionista de la entidad blanquiverde en la sesión vespertina, siempre acompañado de Cándido Cardoso, que «abrió camino» en la sesión matutina. González, que ya estuvo en los amistosos en Linarejos y el Marbella Football Center, también estará en el partido de mañana, en este último escenario, contra el Atlético Sanluqueño. En su visita al campo estuvo hablando tanto con Carrión como con el resto del cuerpo técnico y médico e incluso departió con alguno de los jugadores de la plantilla blanquiverde.

Otro de los aspectos a resaltar, y que se repite cada jornada a la finalización de cada una de las sesiones, es la cercanía de Luis Miguel Carrión con sus jugadores. No hay día en el que mientras los futbolistas realizan los pertinentes estiramientos, el catalán no esté en medio del corro para charlar con ellos, siempre para comentar, entre bromas, algún aspecto del entrenamiento o de algún jugador en concreto.

Más allá de lo que pueda deparar posteriormente la competición liguera, el ambiente en el seno del vestuario, en esta pretemporada, parece tan bueno como suele ser habitual en los veranos que anteceden a cada competición liguera. Dos detalles, típicos, confirman esa valoración: el «túnel» de collejas posterior a la pérdida del juego con balón en mano de ayer por la tarde y los ejercicios que hacen cuatro o cinco futbolistas, después de la sesión, para la televisión oficial del club. Ver a Caro o a Alfaro de porteros esperando el lanzamiento de un compañero o del delegado del equipo, Julio Cruz, se convierte en un espectáculo.

Sobre todo si el improvisado portero logra detener el disparo del compañero. Han sido los momentos de bajar el pistón después de tres sesiones, las dos del lunes y la matutina de ayer, en las que Carrión y su preparador físico, Cristóbal Fuentes, elevaron el listón de trabajo a los jugadores blanquiverdes, que notaron claramente el esfuerzo realizado. Ahora, tanto en la sesión matutina de hoy, como en la delviernes, con el partido contra el Sanluqueño de por medio, podrán tomar un leve respiro que se completará con los dos días dedescanso del sábado y domingo. Porque el esfuerzo, en Benahavís, ha hecho mella.