Vuelta al trabajo con varios sobresaltos. La primera plantilla del Córdoba CF se incorporó ayer para preparar lo que será una nueva final en clave blanquiverde de las varias que aún le queda de aquí a final de temporada para sellar la permanencia en Segunda. Carlos Caballero y Juli, al que ya se le había visto la semana pasada en la ciudad deportiva, estuvieron ausentes, continuando al margen con sus respectivos procesos de recuperación. Bijimine, como se esperaba, no apareció al haberse marchado para la cita en Nairobi, donde la selección del Congo jugará un amistoso ante Kenia. Más alarma provocó la ausencia de Javi Lara, aunque desde el club se puntualizó que estuvo realizando trabajo específico.

ESTABA PREVISTO

Piovaccari fue el primero en abandonar el entrenamiento. El delantero italiano pareció sufrir un pisotón y necesitó un aparatoso vendaje en la rodilla izquierda. Después de eso, el transalpino se retiró al estadio, aunque después fuentes del club dijeron que estaba prevista la marcha anticipada del punta.

Después fueron Antoñito y, sobre todo, Bíttolo los que provocaron el sobresalto. Antoñito no participó en el partidillo con el resto de sus compañeros, lo que levantó suspicacias, máxime después de que el carrilero diestro estuviese casi un mes en el dique seco por molestias musculares. Mientras, Bíttolo sufrió un golpetazo en un choque con Cisma que le obligó a dejar el entrenamiento, aunque, según el club, los dos están bien.

BUENAS SENSACIONES

Las buenas sensaciones las transmitieron ayer Héctor Rodas y Deivid. El zaguero valenciano hizo parte del entrenamiento sin la máscara protectora, de la que se sigue quejando que le resta visión, aunque pudo hacer los partidillos sin mayores problemas.

Mientras, Deivid enfila la que debe ser su última semana en el dique seco tras su operación de cadera. El central canario lleva ya algunas semanas ejercitándose al mismo ritmo que el resto de sus compañeros.