La siguiente parada es Belmez. Para mí. Para nosotros. Para el Córdoba, quizá la última fue Oviedo.

Estimado accionista:

Yo ni había cumplido los 20 años, no tenía trabajo ni vivía en mi ciudad, con lo que rara vez bajaba a ver al Córdoba. Pero compré. No recuerdo lo que sacrifiqué, si un viaje o una cerveza, no recuerdo lo que me gasté ni el número total. Hasta que recibí la carta.

Acuerda la distribución de dividendos a cuenta del ejercicio...

La carta estaba muy bien presentada, a color, con un adorno verde, el texto justificado, aunque con palabras horribles, y una mancha de agua en el folio con el escudo blanquiverde.

Por un importe de 1.500.000 euros...

Estas manchas suelen ser muy comunes en los documentos de las empresas, pero lo único que hacen es desviar la atención del mensaje principal.

Teniendo en cuenta que Ud. ostenta 1000 acciones de la sociedad...

¡Mil acciones! Suena a mucho, ¿verdad? Pero yo solo quería ayudar, no participar en una sociedad. ¡No llegaba a 20 años!

Le corresponde un dividendo a cuenta por un total de 14,32 euros.

No sé si he ganado, si he perdido, si me he quedado igual. Nunca me alegré tan poco por recibir dinero

Que una vez practicada la preceptiva retención del 19% ascendería a 11,60 euros.

¿Pasar de 14,32 a 11,60 es ascender?

Y así llevo toda la semana, con esa cifra en la cabeza. 11,60 euros. ¿Qué puedo hacer con 11,60 euros?

Puede posponer la recepción del pago hasta el próximo 30 de junio.

¡Bien! Tengo tiempo para pensar.

Qué curiosa fecha: ¡30 de junio! No recuerdo lo que me costó aquel abono, pero sí esa noche en Cartagena. No recuerdo lo que me costó el autobús a San Sebastián, pero sí los auriculares en los oídos de todos. Ni siquiera recuerdo lo que me costó la maratón de Madrid el domingo pasado, pero sí mi entrada en el Retiro rodeado de gente. El dinero se va, los momentos se quedan.

11,60 euros. Cuando veo un nuevo error de Stankevicius y esos centrales que no atinan a despejar, me pregunto qué hubiera pasado de haber juntado los 11 euros, los 7, los 500 o los 300.000 de cada accionista para fichar a un defensa, o a dos.

11,60 euros.

En el caso de que opte Ud. por la entrega de entradas al estadio.

No necesito entradas. Soy socio. Yo solo quería un defensa.

Finalmente, si opta por la entrega de abonos, habrá de esperar...

11,60 euros. No voy a esperar. Me voy a Belmez. Me ahorro la mitad de la inscripción del triatlón. Espero que allí no haya dividendos; por favor, solo compren botellas de agua. No quiero dividendos, solo quiero momentos y agua.

11,60 euros. Era mucho dinero entre todos...

Acaba el partido. Estoy seguro de que todos esos que están en la grada del Tartiere no recordarán lo que les costó ir a Oviedo, sino lo larga que se les hizo la vuelta.

Habrá que empezar a buscar momentos más allá del fútbol. Por eso me voy al pantano de Belmez. Porque el Córdoba da dividendos, pero no alegrías.

Atentamente.

José Juan Luque.