El XII centenario de la Mezquita de Córdoba se celebró el 28 de mayo de 1986 con la máxima solemnidad en un acto presidido por los Reyes de España, Juan Carlos y Sofía, y ante 1.200 invitados representantes de toda la sociedad cordobesa que ocuparon las cinco naves del monumento. Manuel Fernández, hoy presidente de la Asociación de la Prensa y entonces redactor de Diario CÓRDOBA, escribió para este periódico la crónica del solemne acontecimiento que, aparte de ocupar toda la portada de ese día, contó con 8 páginas más, con los discursos del Rey; del obispo, José Antonio Infantes Florido; del alcalde, Herminio Trigo, y del presidente de la Junta de Andalucía, José Rodríguez de la Borbolla.
Manuel Fernández recuerda que «era el acto clave de la celebración del XII Centenario de la Mezquita, en aquel mayo en el que en este monumento fue investido doctor honoris causa en la capilla de Villaviciosa el profesor Norman E. Borlaug, Premio Nobel de la Paz en 1970, y en su interior se recogían los doce siglos de su historia donde cada mañana, a las 9.30, desde el coro de la Catedral se levantaban salmodias al Dios de los cristianos en el mismo corazón de la Mezquita de los hijos de Alá, enclavada en el insinuante barrio de la Judería, donde enseñaron su ciencia los descendientes de Abraham».
Juan Carlos I estrenó con su firma el Libro de Oro del Cabildo-Catedral con esta lógica dedicatoria: «Con el afecto en este extraordinario duodécimo aniversario de la Mezquita de Córdoba». Momentos antes, el obispo, José Antonio Infantes Florido, resaltó la intervención de la Iglesia cordobesa en la conservación del monumento al haberlo consagrado al culto católico «y por eso podemos ahora reunirnos en esta Mezquita» de cuyos muros dijo que «transpiran santidad musulmana y santidad cristiana». El Rey resaltó también que «aquí se encuentra hoy la clave de entendimiento entre Oriente y Occidente». Mientras que el alcalde de la ciudad, Herminio Trigo, insistió en que «aquí ofrecemos un lugar donde los hombres pueden entenderse».
