El golpe de efecto del exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez, que a final de mes celebrará un acto con militantes en Sevilla -el primero desde que la gestora socialista convocó el congreso del partido-- se considera un desafío a la secretaria general del PSOE de Andalucía, Susana Díaz, pues acude a su feudo. Y claro que lo es, porque, además, ella irá al acto del 130 aniversario del PSOE de Alcalá de los Gazules (Cádiz). Sánchez podrá desafiar a la presidenta andaluza, pero no se atreverá con la afición futbolística, así que, aunque anunció su visita a Sevilla para el día 29 de enero, la ha adelantado al 28 porque, como él mismo dice, «contra un Betis-Barcelona, no hay quien compita». Esa contraprogramación estaba llamada al fracaso.