El vestuario del Córdoba respiraba aliviado, igual que su técnico, después de cortar la racha de cinco partidos sin ganar. El triunfo en Huesca permite a los blanquiverdes quedarse a un solo punto de las eliminatorias de ascenso y, lo más importante, devolver cierta confianza a una plantilla que andaba con el ánimo muy tocado. "Es una victoria muy importante para nosotros", reconocía Xisco, autor del primer gol de los cordobesistas ayer ante el Huesca.

"Hemos estado muy sólidos, el equipo ha recuperado las mejores sensaciones de los encuentros anteriores en los que estábamos ganando fuera de casa, y, además, es muy importante para el equipo haber dejado la portería a cero"

LA DEFENSA, CONTENTA

De ello estarán especialmente satisfechos los defensas blanquiverdes, sobre quienes se han vertido la mayoría de críticas a lo largo de esta temporada. Oltra volvía a echar mano de sus jugadores más veteranos (Cisma y Deivid por Abel y Bijimine) y por primera vez en la segunda vuelta el conjunto de El Arcángel dejaba su portería a cero. "Hoy (por ayer) le hemos dado una merecida alegría a los nuestros, a los que han venido hasta Huesca y a los que nos siguen", presumía Deivid, que mandaba un mensaje a todo el cordobesismo. "Solo unidos y en familia es posible conseguir triunfos". Y volvía a incidir en el tópico de cada epílogo de Liga.

"Nos quedan ocho finales hasta el final de la temporada, y todos queremos seguir en esta línea. Tenemos que seguir dando la cara como hicimos esta tarde (por ayer), con un triunfo que es muy importante para todos"